Conclusiones del Foro Cambio Climático, impacto en pandemia, realizado por EL HERALDO en alianza con la CRA.

El cambio climático es un problema de suma relevancia para el mundo, ya que va subiendo la temperatura a unos impactos que conllevan a una afectación tanto de los ecosistemas como de la condición humana, según explicó Francisco Charry, director de Cambio Climático del Ministerio del Medio Ambiente durante la instalación del Foro virtual Cambio Climático, impacto en pandemia organizado por EL HERALDO y la Corporación Autónoma Regional del Atlántico, CRA.
“Este problema nos lleva a dar una respuesta contundente y de manera global. El desafío es trabajar de forma colaborativa  para poder dar respuesta a los impactos que se deriven. El cambio climático viene siendo un problema conocido en el mundo con mayor certeza en los últimos 30 años. Esto conduce a una serie de decisiones políticas como el protocolo en Kyoto, luego en 2015 el Acuerdo de París”, expresó.
Reconoció que Colombia no puede ser ajeno a esta problemática de cambio climático y puede contribuir a la solución controlando las concentraciones de gases invernadero para que la temperatura no siga aumentando. Colombia tiene una vulnerabilidad importante frente a los embates del cambio climático por fenómenos de variabilidad climática cómo el Niño o Niña, fenómenos de sequía o de lluvia o desde la misma alteración de las condiciones de temperatura que empieza a generar un cambio en las regulaciones climatológicas del país.

Jesús León Insignares, director de la CRA expuso los principales cinco retos de la era post Covid para la gestión ambiental del Atlántico. “El primero de ellos una mirada al futuro. A pesar que la actividad humana mermó durante el Covid-19, las condiciones ambientales en muchos lugares del mundo, no cambiaron tan drásticamente como esperábamos. La presión antrópica sobre ecosistemas estratégicos fue mucho más fuerte, dada la disminución en los operativos de control ambiental, las quemas en la Amazonia son ejemplo de ello.
León Insignares también se refirió  a la necesidad de redoblar las acciones en dos frentes al mismo tiempo, de manera armónica y sinérgica: en la educación y concientización de las comunidades y en el ejercicio del control ambiental. También hizo un llamado de atención sobre el consumo responsable, “consumir lo que realmente se necesita”.
Señaló que el mismo cambio climático y algunos de sus efectos, como el descongelamiento y la perdida de las áreas glaciares, así como la deforestación y en general, la perdida de la biodiversidad, terminarán afectando la salud y la vida misma de los seres humanos.

En el primero de los paneles sobe “El Cambio Climático en tiempos de Incertidumbre” participaron Juan Camilo Restrepo, Doctor en Ciencias del Mar  de la Universidad del Norte; Henry Jiménez, Coordinador del Diplomado Internacional sobre Cambio Climático del Heidelberg Center para América Latina de la Universidad de Heidelberg, y Carlos Javier Velásquez, Director de la Maestría y Especialización en Derecho Ambiental y Urbano-Territorial de la Universidad del Norte coincidieron en que la pandemia ha sido como un experimento a gran escala de lo que se pretende con muchos de los acuerdos del cambio climático.
“Desde hace 20 años nos están diciendo dejemos de consumir esto o aquello, y no ha funcionado porque la gente lo ve como un escenario muy largo. Estamos manejando dos incertidumbres, los efectos del clima y las necesidades de la sociedad en términos de subsistencia, en términos de bienestar y economía”, expresaron.
Aseguraron que “hemos fallado en el componente científico porque nos hemos concentrado en esos impactos y no en decirle a la gente que podemos hacer, que estamos haciendo y cuál es el camino para prevenir esa situación”.
Recomiendan realizar un cambio profundo, trascendental, articular esfuerzos comenzando por las empresas, cambiando el modelo de producción y consumo y la matriz energética.
Roberto Esmeral Berrío, viceministro de Ordenamiento Ambiental del Territorio, se refirió al tema “Cambio Climático y Biodiverciudades Barranquilla”. Definió la Biodiverciudad como una estrategia para reconciliar el medio ambiente y las áreas verdes con los ciudadanos y manifestó que viene acompañando al Distrito en los proyectos de recuperación de la Ciénaga de Mallorquín, Puerto Mocho y en la siembra de árboles, conjuntamente con la CRA.
En un segundo panel se desarrolló el tema “Negocios Verdes”, con la intervención de Rosamira Guillen, directora ejecutiva de la Fundación Proyecto Tití y Marcela Charris, Absalón de Cosechas Verdes, quienes dieron a conocer como desarrollaron sus proyectos en asocio con la comunidad.
Nathalie Mezza García presentó Climathon Barranquilla 2020, que es un evento global que ocurre en 56 ciudades alrededor del mundo simultáneamente! Es un espacio de encuentro para emprendedores, estudiantes, universidades, grandes empresas, la ciudad y cualquier persona interesada en un futuro más verde para idear soluciones para una economía local más verde.